The Last Airbender

Basada en la serie de nombre Avatar (como la grandiosa película de James Cameron), llega The Last Airbender (el último maestro aire), una película donde se nos narrara cómo Aang un legendario maestro aire regresa al mundo cien años después de desaparecer, encontrándose un panorama distinto al que había conocido en su pasado, al cual se deberá enfrentar acompañado de sus amigos habituales dentro de la serie Katara y Sokka (quien tendrá poco protagonismo comparado con la serie).

Este argumento resulta bastante conocido para cualquier seguidor de la serie, así durante esta película se verán distintos cameos a esta, como lo son el renacer del avatar o la relación familiar de los integrantes de la nación del fuego, por lo que la The Last Airbender puede resultar un capítulo de más de hora y media que resume las dos primeras (y parte de la tercera) temporadas de esta serie.

El resultado es una historia con una linea argumental muy rápida, donde no habrá nada tiempo para comprender los sucesos de las escenas que van sucediendo, causando cierta fatiga en los espectadores, por lo que no sería mucho pedir que se aumenten las escenas de acción entre cada suceso, permitiendo al espectador seleccionar los momentos inolvidables que podrían dejar esta clase de películas.

En términos de espectacularidad, hay dos elementos que destacan sobre los demás, uno son las escenas donde Aang y compañía usan sus habilidades de los elementos, las cuales lucen increíbles, siendo las mejores de toda la película (mención especial el uso del agua y el hielo). El segundo punto digno de mención son las actuaciones tanto de Aang (Noah Ringer) y Zoka (Dev Patel, actor de la destacada ¿Quién quiere ser millonario?) quienes nos dan una actuación creíble de ambos personajes (a pesar de que Aang es muy alegre en la serie), pues en todo momento muestran la seriedad de sus personajes.

Desgraciadamente esos puntos destacables no evitan que la película sea otra de las muchas que surgen basándose en héroes que últimamente están invadiendo Hollywood, por lo que no es apta para otro público que no sean los niños que convierten este tipo de cine en grandes éxitos dentro de la cartelera.

Alan Muñoz Medina